No me queda otra que subir una foto de D. Bejarano, para soñar con estas casas tan inalcanzables para mí.
Dicen que el precio de estas casas, si es que hubiera alguna en venta, es desorbitado. Dicen que son casas pequeñas que necesitarían mucha reforma. Dicen que la legislación urbanística es muy estricta para permitir cualquier modificación de las fachadas, y siguen diciendo que es bastante estricta en cuanto al mantenimiento de las mismas.
Pero como soñar no cuesta dinero, pues yo sueño con mi casita inglesa con su gran patio, sus tres dormitorios, su amplia cocina, sus dos baños, y su gran salón, para disfrutar de ella en esa primavera eterna que la rodea, para poner una barbacoa en el patio e invitar a los amigos en las noches calurosas, sueño con niños jugando por las calles del barrio sin miedos ni temores, y con el cantar de las golondrinas que sobrevuelan el lugar buscando cobijo en la arboleda.
Y sigo soñando con que no existirían problemas económicos de ninguan índole.
A ver si hay suerte.